Los rombos son característicos de las mesas de mosaico marroquíes. Estos cuadrados colocados en punta tienen, además de una función decorativa, una función simbólica: como ojos estilizados (ojos de bruja), protegen a las personas de todo tipo de males. A menudo, los mosaicistas combinan los rombos con los ornamentos más diversos. Sin embargo, hay algo que siempre es igual: las piezas de mosaico esmaltadas se cortan previamente con un martillo afilado a partir de baldosas zellige fabricadas artesanalmente. Cada tablero de mesa es totalmente artesanal y, por lo tanto, absolutamente único.
El amarillo es el color del sol y de la luz. El mismo amarillo brillante de estos rombos Zellige lo conseguían antiguamente los alfareros con un mineral de arsénico tóxico. Desde que se sabe esto, se utilizan pigmentos inocuos. En cuanto al efecto del color, no hay ninguna diferencia: el amarillo recuerda a los limones y a los hermosos campos de flores. En combinación con los mosaicos en tonos terracota, una mesa de mosaico amarilla evoca el verano del sur en su jardín.
Detalles del producto:
• Hecho a mano en Marruecos
• Mosaico de baldosas Zellige esmaltadas y baldosas de arcilla sin esmaltar. Color: amarillo/natural
• Estructura de hierro forjado, color: óxido noble; acabado con barniz transparente
• La placa de mosaico solo se apoya y se puede quitar
• No resistente a las heladas, guardar en un lugar protegido durante el invierno
• Peso de la placa: aprox. 61,5 kg
Dimensiones:
• Altura: aprox. 73 cm
• Longitud: aprox. 120 cm
• Ancho: aprox. 80 cm
Esta mesa de jardín tiene capacidad para hasta 6 personas. Bajo pedido, también se puede encargar en otros tamaños.
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